sábado, 25 de enero de 2020

Capítulo 24. La piedra Onirica


Con una furia en sus ojos Jon confronta a Bartoz y de un golpe lo derriba, preguntando que fue lo que le paso a su hermana, Guts se acerca deteniendo a Jon por la espalda evitando el posible conflicto. Bartoz se levanta y comenta: “fue decisión de Azgheda, no quería que ustedes se involucraran con el pacto del diablo”, y posteriormente procede a contar el pacto completo que tuvieron con el diablo, Jon decide regresar a obligar al diablo de devolver a su hermana, pero Guts le informa lo mucho que han avanzado y que si regresan, la posibilidad de llegar nuevamente a este punto sería imposible, Jon entendiendo la situación acepta continuar.
Mientras todo esto pasa Rhaegar se concentra para curar sus heridas, de forma veloz, las múltiples heridas se van cicatrizando a una velocidad sorprendente, por su parte Adgamis decide vigilar las escaleras para evitar ser atacados por sorpresa, mientras Tauriel inspecciona el lugar, encontrando un panel secreto con una piedra de obsidiana, Guts al ver la piedra reconoce que la piedra es una especie de teletransportador, viendo las opciones el grupo decide tocar la piedra.
El teletransportador conduce al grupo a una especie de cámara de torturas, en donde se encontraba atestada de maquinas destinadas a infligir el mayor dolor posible, en el techo se encontraban múltiples mangueras en donde recorría en su interior un liquido de color violeta oscuro, el grupo decide investigar por el sector, sin embargo no fue mucho lo que tenían que explorar, ya que al frente de ellos se encontraba el amo del lugar, un semielemental de tierra custodiado por muchos tumularios, torturando con su látigo a los prisioneros que se encontraban allí, Adgamis viendo que el semielemental se encontraba distraído lanzó su clásica bola de fuego a los tumularios, para aniquilarlos, sin embargo, los fuertes tumularios resistieron el potente hechizo y se dispusieron a atacar. Con las armas al frente, el grupo se enfrentó a las criaturas, mientras el semielemental se preparaba con su potente espadón a la batalla, Adgamis aprovechó uno de los pergaminos conseguido y le lanzó un poderoso dominar persona al enemigo, controlándolo en el acto, el semielemental bajo las ordenes de la hechicera se encargó de eliminar al resto de los tumularios junto con los guerreros del grupo, una vez terminada la batalla y con su nuevo “aliado” liberan a los prisioneros, Festalon Girrot un clérigo elfo de Elhonna, Erdso un monje humano y Tamme una plebeya humana de Rastor quien se encontraba con su amiga Jear una mujer orca también plebeya, Rhaegar la reconoce pues ella era originaria de la tribu de su tía Kreugna, estos rehenes agradecieron a los héroes y con mucha firmeza todos decidieron ayudar a los mismos a terminar de eliminar el atrio interior.
Es entonces que Adgamis le exige al semielemental regresar las cosas a los rehenes, cosa que hace mientras se presenta ante su ama como Yrthuk Innar, entre las cosas se encontraba una varita de curar heridas leves, la cual Festalon uso hábilmente en curar a los rehenes incluyéndose, Tauriel buscó nuevamente en el lugar, encontrando otro panel con dos teletransportadores, uno para regresar y otro para continuar a un nivel inferior, el grupo decide seguir bajando dentro del atrio interior. El siguiente nivel se encontraba iluminado con unas antorchas de revelación situadas sobre unas pértigas, las cuales iluminaban el suelo , en donde se encontraba un mapa en relieve de todo el continente, tierras como Greyhawk, Freeport, Hommlet, Rastor, e incluso el lejano Sunndi se podían apreciar, sin embargo, las pértigas generaban unas sombras que asemejaban unas garras que acechaban el mapa, el grupo intuyó que este lugar era una especie de teletransportador, pero sin saber como usarlo decidieron continuar, igual que el nivel anterior se encontraba otro panel, que conducía a un nivel inferior, nuestros héroes decidieron seguir descendiendo.
En el siguiente nivel se encontraron en la biblioteca del atrio, una habitación lúgubre con infinidad de libros, ojeando un poco vieron bastantes tomos de nigromancia e historia, pero con el tiempo en contra el grupo buscó inmediatamente el panel para continuar descendiendo. En el siguiente nivel los aventureros llegaron a una pequeña habitación redonda, la cual solo se encontraba un objeto, un brasero de cristal que contenía un líquido negro obviamente maligno. Adgamis ordena a su esbirro que buscara en el interior, Yrthuk obedece metiendo la mano, inmediatamente la fuerza vital del guerrero se va de su cuerpo, y es solo con la ayuda de los demás que logran sacarlo de allí, afortunadamente Yrthuk logró sacar un poderoso talismán que Adgamis luego de identificarlo, vió que era un talismán de pureza.

El grupo continuó descendiendo al último sub-nivel lamentablemente esta habitación era con forma de cono invertido, y a diferencia de las otras habitaciones sus paredes no eran negras, eran transparentes mostrando el magma que se encontraba alrededor de la extraña torre, la base de la misma se encontraba al descubierto con tal propósito de caer directamente al magma ¡Peor aún!  Solo se podía evitar una horrenda muerte únicamente colgándose de unas cadenas que se encontraban en el techo, eso no era todo, cuatro quasits se encontraban en el lugar ansiosos de eliminar a los intrusos.
La mayoría de los héroes pudieron aferrarse a una de las cadenas, Shadow por ser un caballo cayó directamente al suelo, pero Adgamis usó su varita de levitar para evitar la fatídica muerte, por su lado Tamme no pudo sostenerse y cayo al fondo, Tauriel lanzó su poción de protección al fuego, evitando gran parte del daño de la plebeya, mientras el grupo estaba en este apuro, los quasits se lanzaron al ataque, la situación se complicó aun más cuando el monje Erdso se volvió loco y empezó a atacar tanto a enemigos como amigos, Guts le informa a todos que los que no puedan pelear intenten irse del lugar, Rhaegar buscó con suma urgencia el panel secreto para regresar, mientras Adgamis lanzaba sus conjuros de levitar a la plebeya y a los que no pudieran trepar, solo Tauriel y Jon pudieron hacerle frente a los quasits, mientras Bartoz intentaba calmar al monje.

Luego de derrotar a los demonios Adgamis logra hechizar a Erdso, dándose cuenta de la marca de la hermandad escarlata, por un momento decidió dejarlo en el lugar, pero Bartoz toma al monje y dirigiéndose al panel huye con él.
Una vez en el anterior nivel, Festalon revisa al hechizado monje y se de cuenta que las torturas volvieron loco al hombre, el grupo decide darles a los rehenes uno de los palos de refugio e indicándoles la situación del atrio exterior les piden que esperen en el lugar, Adgamis espera que el monje hechizado no muera, pues tiene muchas preguntas sobre la maligna secta.
Nuevamente solos, los aventureros subieron la sinuosa escalera al segundo nivel, en el se encontraron con la piedra onírica, una enorme roca multicolor que se ensanchaba a medida que subía al techo, siendo protegida por varios paneles de color ocre, los cuales al analizar su naturaleza mágica Adgamis determina que son espacios extradimensionales tal como el conjuro de la magnífica mansión de Mordenkainen, siendo un total de cinco espacios extradimensionales, el grupo decide revisarlos, encontrando habitaciones vacías posiblemente de los soñadores de la perdición, aunque uno de ellos poseía un arcón con varios conjuros útiles, que el grupo aprovecho tomar para un futuro cercano.
Por su lado Tauriel vio un armario que contenía 10 pociones que luego de la identificación de Adgamis, se descubrió que eran pociones para poder atravesar la piedra onírica. Tomando todos los objetos útiles el grupo subió las escaleras al tercer nivel.
En este nivel el grupo observó que la habitación estaba casi ocupada por la piedra multicolor que va del suelo al techo, siendo mas gruesa a medida que subía al techo, algunas plumas enormes se veían en el suelo y un ruido de gruñidos se escuchaban en el otro lado, Tauriel usa un pergamino de visión verdadera y se da cuenta de un poderoso ser que se encontraba al final de la habitación junto con varios tumularios, Bartoz alcanza a observar la pluma y con la descripción de Tauriel, deduce que es un demonio Vrock.

El ser demoníaco al detectar la presencia de los héroes se lanza al ataque con su poderosa presencia, los Tumularios de igual forma lo siguieron a la batalla, es entonces que Adgamis usa un hechizo de muro de fuego para evitar el avance de los enemigos, pero estos fuertes tumularios poco o nada se hicieron daño al atravesar el poderoso muro, todo quedó a manos de los guerreros Bartoz, Rhaegar, Guts y el dominado Yrthuk eliminar a los tumularios, mientras Jon y Adgamis usaron sus flechas y proyectiles en contra del poderoso demonio.

El inmundo vrock poco pudo hacer algo en contra de los héroes así que el demonio huyó del lugar teletransportándose, no sin antes dejar otro vrock en su lugar, sin embargo, la amenaza de los tumularios ya no existía, por lo que los guerreros avanzaron al demonio eliminándolo en un santiamén, victoriosos el grupo continuó en el siguiente nivel.
Este nivel ocupado casi por completo por la enorme piedra emanaba una aura de locura, el grupo al observar en su interior, veían formas oscuras que parecían estar flotando muy lentamente dentro de la piedra como si fueran a la deriva, es ahí cuando tanto Tauriel y Rhaegar los invade el aura maligna y de repente caen desmayados, dejando al resto del grupo en shock.

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Epílogo

Guts abrió los ojos, la sonrisa de Tauriel de ver que su amigo se encuentra con vida, mientras se incorpora Kella intentaba rastrear a los...