El tiempo apremia y nuestros héroes continúan el camino, saben que deben ir
a las puertas dobles en donde el frío era tan intenso que les helaba el alma
cerca del cuarto de Hedrack, allá está su entrada hacia el atrio interior y la
obtención del orbe mencionado por Varachan, los aventureros siguieron por el
camino retornando a la entrada de la puerta del agua, confiados en su poder fueron
emboscados por la antigua mascota del guardia Kuo-Toa de la puerta del agua, un
Khuul salvaje que dentro de la piscina del cuarto usó sus mejores ataques en
contra de Rhaegar, apresándolo con sus fuertes tenazas, tanto Azgheda como
Tauriel atacaron a la criatura, pero se dieron cuenta que alguien en las
sombras estaba ayudando al monstruo, Adgamis usó su vista que mediante
poderosos conjuros élficos lograba ver lo invisible, notando un pequeño demonio
que conjuraba en favor del Khuul.
La hechicera dispuso sus proyectiles mágicos en contra del demonio, logrando desconcentrar al ser, quien en su locura se transformó en un lobo terrible que atacó sin piedad a los más cercanos, pero gracias a la unión del grupo, los monstruos fueron aniquilados.
La hechicera dispuso sus proyectiles mágicos en contra del demonio, logrando desconcentrar al ser, quien en su locura se transformó en un lobo terrible que atacó sin piedad a los más cercanos, pero gracias a la unión del grupo, los monstruos fueron aniquilados.

Los aventureros investigaron, encontrando las palancas mencionadas por
Varachan y procedieron a realizar el ritual para conseguir el tan anhelado orbe,
luego de formar la llave maestra (unión de las llaves mayores que poseían)
girar las palancas en el orden y soplar el cuerno maldito, una cortina purpura
se asomó frente a ellos, el lugar conducía a la cúpula oscura, solo allí se
encontraría el orbe, Azgheda decidió ir por el objeto y despidiéndose de sus
amigos entró con la antorcha.
Dentro solo se encontraba un huevo encima de una plataforma, una voz
profunda resonó en el lugar
“De nuevo los mortales osan penetrar en la cúpula
oscura, arrodíllense ante la esencia de Tharizdun y serán bendecidos con sus
regalos, búrlense de él y serán aniquilados”
Azgheda se acercó notando a su
paso el nombre de Tharizdun escrito en la misma plataforma, sin vacilar la
druida se arrodillo y mientras mencionaba el nombre del dios tocó el huevo,
este se rompió mostrando una calavera plateada con unas protuberancias en la
coronilla, de repente la voz profunda hablo con la druida.
“El orbe del olvido ya fue anteriormente tomado, por lo tanto, coge esta copia y sírveme”
Azgheda al tocar el orbe una proyección del templo del mal elemental mostró
una calavera de cristal parecida al orbe de la muerte plateada, el orbe le
enseño también secretos que puede ser usado por el portador del mismo, sin
embargo, Azgheda prefirió salir del lugar, pero al darse cuenta se encontraba
en otra área, como si hubiera sido teletransportada, aquí el lugar emanaba a
muerte, la druida se encontraba en los pies de una sinuosa escalera oscura provista
de un elegante pasamanos y al fondo un altar oscuro en donde alcanzó a apreciar
dos pares de ojos rojizos que emanaban odio, la druida sin vacilar dio media
vuelta y huyo de la habitación.
Corriendo con todas sus fuerzas la druida se encontró con sus compañeros,
pero si Azgheda estaba destinada a obtener el orbe, Tauriel sería la persona
ideal para poder usarlo, debido a su aura oscura de asesina, todos los demás
estuvieron de acuerdo, y dejando el lugar se fueron a descansar.
Al día siguiente, los héroes decidieron ir al atrio interior por el pasillo
secreto encontrado por Tauriel, por el camino se toparon con un muro de fuerza,
el cual fue destruido con un desintegrar de Adgamis, al salir se encontraron en
el patio mencionado por la asesina, era de día, aunque en este punto no se
podía ver el sol por culpa de los vapores sulfurosos emanados por las grietas
del volcán dormido, pero algo si se pudo apreciar en toda su magnificencia,
erguida como una aguja se encontraba en el centro la torre de la aguja negra,
morada de los soñadores de la perdición.
Los aventureros llegaron a la puerta y mostrando el orbe de la muerte
plateada exigieron a la mágica puerta parlante acceder a su interior, la puerta
burlona decidió seguirles el juego, no sin antes despertar a los habitantes de
su interior.
El primer nivel fue una sorpresa para el grupo, ya que fueron recibidos por
los tumularios vigilantes del patio y los guardianes del mismo, un par de engendros
producto de la unión monstruosa entre dragones y dinosaurios, cubiertos de
metal derretido sobre sus alas verdes y negras, otorgándoles una armadura
adicional a las ya muy fuertes escamas.
Los monstruos atacaron sin piedad, el primero se abalanzó sobre nuestra
valiente druida, quien a pesar de estar nuevamente convertida en oso polar su
pelaje no resistió a las fuertes mandíbulas de la criatura, el otro monstruo
lanzó su arma de aliento y es cuando Adgamis uso de sus velos místicos para
bloquear el arma, mientras los poderosos tumularios se lanzaron en contra de
los guerreros. Todo este ruido de batalla atrajo la atención de un guardia vestido
con túnicas oscuras y cubierto con un casco ornamentado de cuernos, quien se
encontraba acompañado de mismísimo Satau, los cuales bajaron las escaleras del
segundo nivel para apoyar a sus criaturas.
Azgheda al ver eso, decide conjurar un mar de peces fantasmagóricos que se
dispusieron a devorar a todo ser que se encontrara en el lugar, Jon decide junto
con Bartoz ayudar a Azgheda quien se encontraba muy herida en contra del
monstruoso semidragón verde, Guts por su parte avanza en el mar de peces
fantasmales para encarar inmediatamente a Satau, pero su paso es cortado por la
horda de tumularios impidiendo su avance, mientras tanto Rhaegar decide
defender a Adgamis la cual estaba a punto de ser devorada por el otro semidragón,
Tauriel por último se vuelve invisible y decide tomar por sorpresa al oráculo
ilicido.
La pelea se tornó dramática cuando en un giro de acontecimientos, Satau se
teletransporta con el guardia cerca al semidragón negro, Tauriel aprovecha para
atacar al guardia, apuñalándolo por la espalda, pero el guardia era mas
poderoso de lo que ella pensaba y con una palabra la paralizó en su totalidad justo
a merced del mismo. En ese momento una voz resurgió en su cabeza, era la voz de
Satau quien se expresó con mucho goce y deleite: “Pequeña niña, muy pronto tus
pesadillas vistas en mi cuarto se harán realidad, serás violada y torturada
lentamente hasta que podamos extraer tu delicioso cerebro de tu cráneo”
Tauriel recordó si visión y siendo incapaz de reaccionar esperó su muerte invadida
por el terror, pero gracias a Adgamis quien en el último minuto levantó su
ultimo velo para proteger a su hermana electrocutó al oráculo matándolo al
instante, el guardia quien era el primer soñador de la perdición con quien
nuestro grupo se enfrentó, logro fortalecer aún más al semidragón, quien
despedazo a Rhaegar dejándolo al borde de la muerte, el semiorco recurre a su
furia salvaje para caer de forma heroica en el combate contra tal abominación,
por su parte Jon llena de flechas al guardián mientras Bartoz, Azgheda y Guts
terminan con el otro semidragón y los tumularios restantes.
Una vez finalizada la cruenta batalla, Azgheda recupera su forma humana y
viendo que el pacto con el diablo no puede ser debido a la muerte del oráculo
del templo, decide encerrar el alma del ilicido en la gema, sin embargo las
condiciones del trato con el diablo eran precisas y las almas que buscaba eran
las de la triada, en concreto el alma del segundo, por lo tanto, como castigo
el cuerpo de Azgheda también fue encerrada dentro de la gema.
¿Cuál será el destino de Azgheda? ¿Qué otros peligros esperan a nuestros
héroes? Uno a uno van cayendo y al final ¿todo será oscuridad y destrucción?
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