Con una furia en sus ojos Jon confronta a Bartoz y de un golpe lo derriba,
preguntando que fue lo que le paso a su hermana, Guts se acerca deteniendo a
Jon por la espalda evitando el posible conflicto. Bartoz se levanta y comenta: “fue
decisión de Azgheda, no quería que ustedes se involucraran con el pacto del
diablo”, y posteriormente procede a contar el pacto completo que tuvieron con
el diablo, Jon decide regresar a obligar al diablo de devolver a su hermana,
pero Guts le informa lo mucho que han avanzado y que si regresan, la
posibilidad de llegar nuevamente a este punto sería imposible, Jon entendiendo
la situación acepta continuar.
Mientras todo esto pasa Rhaegar se concentra para curar sus heridas, de
forma veloz, las múltiples heridas se van cicatrizando a una velocidad
sorprendente, por su parte Adgamis decide vigilar las escaleras para evitar ser
atacados por sorpresa, mientras Tauriel inspecciona el lugar, encontrando un
panel secreto con una piedra de obsidiana, Guts al ver la piedra reconoce que la
piedra es una especie de teletransportador, viendo las opciones el grupo decide
tocar la piedra.
El teletransportador conduce al grupo a una especie de cámara de torturas, en
donde se encontraba atestada de maquinas destinadas a infligir el mayor dolor
posible, en el techo se encontraban múltiples mangueras en donde recorría en su
interior un liquido de color violeta oscuro, el grupo decide investigar por el
sector, sin embargo no fue mucho lo que tenían que explorar, ya que al frente
de ellos se encontraba el amo del lugar, un semielemental de tierra custodiado
por muchos tumularios, torturando con su látigo a los prisioneros que se
encontraban allí, Adgamis viendo que el semielemental se encontraba distraído lanzó
su clásica bola de fuego a los tumularios, para aniquilarlos, sin embargo, los
fuertes tumularios resistieron el potente hechizo y se dispusieron a atacar.
Con las armas al frente, el grupo se enfrentó a las criaturas, mientras el
semielemental se preparaba con su potente espadón a la batalla, Adgamis aprovechó
uno de los pergaminos conseguido y le lanzó un poderoso dominar persona al
enemigo, controlándolo en el acto, el semielemental bajo las ordenes de la
hechicera se encargó de eliminar al resto de los tumularios junto con los
guerreros del grupo, una vez terminada la batalla y con su nuevo “aliado”
liberan a los prisioneros, Festalon Girrot un clérigo elfo de Elhonna, Erdso un
monje humano y Tamme una plebeya humana de Rastor quien se encontraba con su amiga
Jear una mujer orca también plebeya, Rhaegar la reconoce pues ella era
originaria de la tribu de su tía Kreugna, estos rehenes agradecieron a los
héroes y con mucha firmeza todos decidieron ayudar a los mismos a terminar de
eliminar el atrio interior.

En el siguiente nivel se encontraron en la biblioteca del atrio, una
habitación lúgubre con infinidad de libros, ojeando un poco vieron bastantes
tomos de nigromancia e historia, pero con el tiempo en contra el grupo buscó inmediatamente
el panel para continuar descendiendo. En el siguiente nivel los aventureros llegaron
a una pequeña habitación redonda, la cual solo se encontraba un objeto, un
brasero de cristal que contenía un líquido negro obviamente maligno. Adgamis ordena
a su esbirro que buscara en el interior, Yrthuk obedece metiendo la mano,
inmediatamente la fuerza vital del guerrero se va de su cuerpo, y es solo con
la ayuda de los demás que logran sacarlo de allí, afortunadamente Yrthuk logró
sacar un poderoso talismán que Adgamis luego de identificarlo, vió que era un talismán
de pureza.
El grupo continuó descendiendo al último sub-nivel lamentablemente esta habitación
era con forma de cono invertido, y a diferencia de las otras habitaciones sus
paredes no eran negras, eran transparentes mostrando el magma que se encontraba
alrededor de la extraña torre, la base de la misma se encontraba al descubierto
con tal propósito de caer directamente al magma ¡Peor aún! Solo se podía evitar una horrenda muerte únicamente
colgándose de unas cadenas que se encontraban en el techo, eso no era todo,
cuatro quasits se encontraban en el lugar ansiosos de eliminar a los intrusos.

Luego de derrotar a los demonios Adgamis logra hechizar a Erdso, dándose cuenta
de la marca de la hermandad escarlata, por un momento decidió dejarlo en el
lugar, pero Bartoz toma al monje y dirigiéndose al panel huye con él.
Una vez en el anterior nivel, Festalon revisa al hechizado monje y se de
cuenta que las torturas volvieron loco al hombre, el grupo decide darles a los
rehenes uno de los palos de refugio e indicándoles la situación del atrio
exterior les piden que esperen en el lugar, Adgamis espera que el monje
hechizado no muera, pues tiene muchas preguntas sobre la maligna secta.
Nuevamente solos, los aventureros subieron la sinuosa escalera al segundo
nivel, en el se encontraron con la piedra onírica, una enorme roca multicolor
que se ensanchaba a medida que subía al techo, siendo protegida por varios paneles
de color ocre, los cuales al analizar su naturaleza mágica Adgamis determina
que son espacios extradimensionales tal como el conjuro de la magnífica mansión
de Mordenkainen, siendo un total de cinco espacios extradimensionales, el
grupo decide revisarlos, encontrando habitaciones vacías posiblemente de los soñadores
de la perdición, aunque uno de ellos poseía un arcón con varios conjuros útiles,
que el grupo aprovecho tomar para un futuro cercano.
Por su lado Tauriel vio un armario que contenía 10 pociones que luego de la
identificación de Adgamis, se descubrió que eran pociones para poder atravesar la
piedra onírica. Tomando todos los objetos útiles el grupo subió las escaleras
al tercer nivel.
En este nivel el grupo observó que la habitación estaba casi ocupada por la
piedra multicolor que va del suelo al techo, siendo mas gruesa a medida que
subía al techo, algunas plumas enormes se veían en el suelo y un ruido de
gruñidos se escuchaban en el otro lado, Tauriel usa un pergamino de visión
verdadera y se da cuenta de un poderoso ser que se encontraba al final de la
habitación junto con varios tumularios, Bartoz alcanza a observar la pluma y
con la descripción de Tauriel, deduce que es un demonio Vrock.
El ser demoníaco al detectar la presencia de los héroes se lanza al ataque
con su poderosa presencia, los Tumularios de igual forma lo siguieron a la
batalla, es entonces que Adgamis usa un hechizo de muro de fuego para evitar el
avance de los enemigos, pero estos fuertes tumularios poco o nada se hicieron
daño al atravesar el poderoso muro, todo quedó a manos de los guerreros Bartoz,
Rhaegar, Guts y el dominado Yrthuk eliminar a los tumularios, mientras Jon y
Adgamis usaron sus flechas y proyectiles en contra del poderoso demonio.
El inmundo vrock poco pudo hacer algo en contra de los héroes así que el
demonio huyó del lugar teletransportándose, no sin antes dejar otro vrock en su
lugar, sin embargo, la amenaza de los tumularios ya no existía, por lo que los
guerreros avanzaron al demonio eliminándolo en un santiamén, victoriosos el
grupo continuó en el siguiente nivel.
Este nivel ocupado casi por completo por la enorme piedra emanaba una aura
de locura, el grupo al observar en su interior, veían formas oscuras que parecían
estar flotando muy lentamente dentro de la piedra como si fueran a la deriva,
es ahí cuando tanto Tauriel y Rhaegar los invade el aura maligna y de repente caen
desmayados, dejando al resto del grupo en shock.